Decepcionada

Sí, el título de esta entrada es la palabra más inminente que me viene a la cabeza para definir este mes de junio. Me siento decepcionada conmigo misma, y creo que con bastante razón. A punto de terminar los exámenes voy a batir un record propio de no asistencia a estos, lo peor de todo es que yo misma hago una criba de "las que me voy a preparar y las que no" normalmente declino presentarme a las que son durillas y opto por las fáciles o parcialmetne asumibles. Con este último grupo que yo selecciono voy a clase y me intereso, peeero cuando llega el momento de rendir cuentas me echo atrás. La verdad, es que podré poner cuantas excusas quiera, el calor, la falta de motivación, que hay que trabajar y un largo etc., pero realmente yo sé que lo que ma ha podido ha sido la vagancia y la pereza; por ello mi conciencia paga ahora. Además la sensación universal de todo universitario de que si me hubiera organizado más realistamente esto poidría haber sido diferente, cuan desesperante es perder días estudiando algo para lo que al final no te presentar y el consiguiente pensamiento de... "si el tiempo que he perdido con esta se lo hubiera dedicado a la otra ¬¬" En fin, echado a perder estos días y con un insufrible dolor de cabeza que me tiene a mal traer este fin de semana (maldito calor, maldito V centenario) vamos a intentar hacer un esfuerzo por equilibrar la balanza y a mi favor diré que por fin terminé con el curso de postgrado y ya soy especialista universitario en Neuorpsicología Clínica(suena bien, eh?), algo es algo. Anda que no me dio disgustos también, jeje. Pues he aquí el fin del vaciado de conciencia que ahora perturbará mis ratitos antes de dormir.